El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en la República Dominicana alertó de que el proyecto de ley del Código Penal contiene un artículo que “sugiere a la sociedad dominicana que la violencia ejercida hacia niños, niñas y adolescentes en el hogar está permitida siempre que no represente un patrón y no sea reiterada”.
Durante su participación en las vistas públicas del polémico proyecto la semana pasada, Unicef reiteró sus recomendaciones para la ejecución del nuevo Código Penal y llamó a proteger la integridad de los niños en todos los aspectos.
“Entendemos que la Comisión Especial que estudia el proyecto de ley del Código Penal de República Dominicana tiene un reconocido interés, apertura y compromiso con el manejo de los temas de protección de los derechos de las niñas, niños y adolescentes del país, nación que en dos ocasiones ha ratificado la Convención sobre los Derechos del Niño. Esto quedó demostrado en la invitación a vistas públicas que hiciera dicha Comisión a la sociedad, siendo nuestra organización una de las entidades invitadas a participar de este encuentro”, expresó Anyoli Sanabria, representante adjunta de Unicef.
Unicef llamó a garantizar la compatibilidad entre el artículo 19 de la Convención de los Derechos del Niño y el Código Penal, ya que dicho artículo insta a los Estados signatarios a emplear todos los esfuerzos para proteger a niñas, niños y adolescentes contra todo tipo de violencia.
“La petición de Unicef no es nueva. En 2023, el Comité de los Derechos del Niño recomendó al Estado dominicano prohibir de forma expresa y eliminar los castigos corporales, tanto de la ley como de la práctica, en todos los ámbitos, incluidos el hogar, los centros con modalidades alternativas de cuidado y las guarderías. Esta recomendación fue aceptada por la delegación del país en Ginebra, liderada por el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), reconociendo la deuda de la nación dominicana en armonizar su marco legal con las mejores prácticas internacionales para proteger a los niños, niñas y adolescentes contra la violencia”, agregó Sanabria.
La vocera de Unicef destacó que “en ese mismo año, una delegación del Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (INAIPI) y UNICEF se reunió con los integrantes de las Comisiones de Justicia, de Niñez y Adolescencia, Juventud, Derechos Humanos y Asuntos Municipales, centrando su atención en el artículo 123″.
“En su actual redacción, el artículo sugiere a la sociedad dominicana que la violencia ejercida hacia niños, niñas y adolescentes en el hogar está permitida siempre que no represente un ‘patrón’ y no sea ‘reiterada’. Esta interpretación impone la carga probatoria a la víctima para obtener medidas protectoras o penales, ya que, además de comprobar la violencia, debe también comprobar la repetición de la conducta”, afirmó Sanabria.
Además, puntualizó que “el mensaje social que este artículo transmite es esencialmente dañino para la infancia, pues autoriza el uso de la violencia, apenas limitando su recurrencia. Tras analizar las estadísticas dominicanas e internacionales, podemos afirmar que las víctimas más frecuentes serán los niños y niñas más pequeños y aquellos con una discapacidad”.
En todo el mundo, persisten normas sociales perniciosas que sustentan métodos de crianza violentos. En República Dominicana, el 64% de los niños, niñas y adolescentes entre 1 y 14 años ha sufrido violencia física o psicológica por parte de sus cuidadores, y la cifra aumenta a 70% en las edades comprendidas entre los 3 y 4 años, según datos de la Encuesta de Indicadores Múltiples por Conglomerados de 2019 (ENHOGAR-MICS) realizada por Unicef y la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
UNICEF subrayó que “es particularmente importante escuchar la voz de los niños, niñas y adolescentes”.
“Hemos consultado a cientos de adolescentes y jóvenes dominicanos para conocer sus principales preocupaciones, siendo las más frecuentes la salud mental y la violencia contra ellos y ellas”, sostuvo.
“Nos contaron historias de cómo suelen ser castigados por cosas que no están bajo su control, porque no les creen o porque los adultos están preocupados por temas de adultos. Nos han hablado de la sensación de injusticia y desamparo que sienten en estas ocasiones y cómo esto afecta su autoestima y salud mental”, manifestó Sanabria.
En un comunicado de prensa, Unicef enfatizó en que “la educación respetuosa no significa promover un estilo de crianza permisivo, sino respetar la dignidad de los niños, niñas y adolescentes en todo momento con límites claros basados en la razón, la sensibilidad, el amor, la igualdad, la tolerancia y el respeto”.
Asimismo, aseveraron que “para la República Dominicana es fundamental que la prohibición de la violencia física en todos los entornos se incorpore de manera expresa en los principales instrumentos jurídicos de la nación, y uno de ellos es el Código Penal. Es necesario que el Senado y la Cámara de Diputados se comprometan con los niños, niñas y adolescentes revisando el artículo 123 para eliminar las excepciones”.