República Dominicana presentó una reducción de 20.4 % a 6.7 % en la población que sufre hambre, observándose también una reducción en el indicador de personas con desnutrición, de acuerdo con el Análisis de Inseguridad Alimentaria Aguda mediante la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF), presentado este martes por la organización de ayuda humanitaria World Vision.
Según este informe, tras analizar toda la geografía nacional se determinó que el 11 % de la población dominicana se encuentra en situación de crisis o emergencia sanitaria, siendo las provincias Elías Piña, Independencia, Monseñor Nouel, Montecristi y Valverde las que cuentan con menor seguridad alimentaria.
Para agosto de 2024, la proyección era que 7.5 millones de tuvieran sus alimentos garantizados, mientras, un millón estuviera en fase de crisis o fase 3, con porcentajes relevantes de hogares que cubren marginalmente sus requerimientos de energía y nutrientes.
“Es importante reconocer que como país hemos tenido avances significativos en temas de seguridad alimentaria. El 89 % de la población dominicana, de acuerdo al CIF, se encuentra en una fase acentuada o moderada de seguridad alimentaria, es decir, tiene acceso a alimentos suficientes”, comentó Vladimir Medrano, gerente de Impacto de World Vision.
Medrano recordó que aún quedan brechas por cubrir y estas se reflejan en retraso en el crecimiento, el aumento de casos diabetes y aumento de obesidad en niños y adolescentes, así como la lactancia materna que todavía constituye un desafío para el país.
Campaña “Suficiente”
Dentro del marco de la celebración de sus 35 años de operaciones en República Dominicana, con el propósito de contribuir a la reducción de los índices de malnutrición infantil y garantizar la seguridad alimentaria para todos los niños y niñas en el país, World Visión lanzó su campaña contra el hambre “Suficiente”.
“El artículo 24 de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas establece claramente la necesidad fundamental de que los niños reciban una buena alimentación. Esto aplica a todos los niños, independientemente de dónde vivan o de sus circunstancias. El artículo también indica que los niños y niñas deben tener una cantidad adecuada de alimentos nutritivos, vivir en un entorno seguro, incluyendo el acceso a agua potable, y que sus cuidadores deben recibir formación sobre nutrición y prácticas óptimas de alimentación para niños y niñas”, destacó Elicaury Bautista Bidó, directora país de World Vision.
Vladimir Medrano, gerente de Impacto en World Vision. (EDDY VITTINI)
Explicó que una alimentación nutritiva suficiente es fundamental para el crecimiento físico y el desarrollo cerebral de los niños y niñas pequeños. A medida que crecen, los alimentos nutritivos también los protege de enfermedades comunes y les proporcionan el combustible necesario para aprender.
Por tanto, la campaña “Suficiente” viene a atender estos desafíos, abordando la causa raíz del hambre y la malnutrición (hambre cero), promoviendo cambios estructurales, a través de políticas públicas sostenibles que garanticen el acceso a alimentos nutritivos para todos, movilización de partes interesadas para promover acciones colectivas en momentos clave, y concientización a la sociedad sobre la importancia de una alimentación adecuada para la infancia.
Se estará implementando en 70 países, impactando directamente a 25 millones de niños.
Calidad nutricional en las escuelas
Ejemplos de platos balanceados para niños. (EDDY VITTINI)
Yomaira Tejeda, encargada del departamento de Nutrición del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie), destacó la importancia de garantizar la calidad nutricional de los estudiantes y resaltó los esfuerzos del Estado para mejorar los programas de alimentación escolar.
Habló sobre los cambios que se han realizado en el desayuno escolar, el cual impacta al 20 % de la población dominicana y lo definió como “el programa social más grande y complejo en República Dominicana”.
Tejeda aseguró que, en los centros educativos, el hambre se redujo a 0 % y en los últimos 12 años, la desnutrición permanece por debajo del 3 %, reduciendo así la deficiencia de micronutrientes.
Algunas de las acciones que destacó fue la eliminación del néctar, lo que se traduce en una reducción de 27 mil libras de azúcar en los últimos tres años, así como la modificación de recetas que permitieron bajar la tasa de sodio (sal) de 300 % a 88 %.
De igual modo, se han incorporado nueve frutas frescas a la merienda escolar, que incluyen mangos, piñas, guineos, lechosas, pitahayas y mandarinas, todas de producción local. También se aumentó el uso de coco, avena y vegetales en los platos que consumen los niños.