En un acto de imprudencia, dos patanistas que transitaban en paralelo en la avenida Pedro Livio Cedeño, cerca de la avenida Duarte, en el Distrito Nacional, se detuvieron para saludarse, obstaculizando el tránsito, en un hecho ocurrido este viernes a las 3:50 de la tarde.
Un conductor, enfermero de profesión, que transitaba por la zona relató a Diario Libre la impotencia que sintió al presenciar la imprudencia, que duró alrededor de “trece minutos”. “El semáforo cambió dos veces y seguían parados”, dijo.
El conductor de la patana de matrícula F-010874, que iba por el único carril de la vía en dirección este-oeste, fue quien se desmontó del vehículo para hablar con su colega y solo regresó cuando le imploraron que se moviera para darle el paso a una ambulancia privada que llevaba un paciente que había sufrido un infarto.
“El conductor de la ambulancia tuvo que apearse y decirle al patanista que tenía un paciente infartado y debía trasladarlo al hospital, le dijo que se le iba a morir”, contó el ciudadano que grabó un video del incidente.
De acuerdo a la Ley 63-17 sobre Tránsito Terrestre, en su artículo 237: “Los conductores no podrán estacionar o detener un vehículo en las vías públicas en forma tal que se estorbe u obstruya el libre tránsito, o cuando por circunstancias excepcionales se haga difícil y arriesgado el fluir del mismo”.
A su vez, el artículo 93 indica que “todos los conductores que perciban las señales especiales, y que anuncien la proximidad de un vehículo para emergencia, adoptarán las medidas adecuadas para facilitarles el paso según las circunstancias del momento y lugar, y procederán a detenerse si fuera preciso o a desplazarse hacia su derecha”.
